Las minas actuales buscan activamente oportunidades para reducir su consumo de combustibles fósiles como parte de un esfuerzo más amplio para reducir su impacto medioambiental. Para lograr este objetivo, las minas necesitan soluciones de manejo de materiales energéticamente eficientes como correas transportadoras de superficie para largas distancias o equipos de extracción en las áreas de chancado y los rajos.
La huella de carbono de una instalación está en función de cuántos equipos tiene. Cuantos más equipos haya en una operación, mayor será su huella de carbono. Nuestra filosofía en el diseño de sistemas de manejo de materiales es dejar que la gravedad haga la mayor parte del trabajo posible. Después de todo, la gravedad siempre es confiable y también es neutral en carbono. Aplicamos este enfoque a los diseños de contenedores y tolvas, asegurándonos de que funcionen sólo por gravedad y no requieran ninguna ayuda para el flujo de materiales, lo que en última instancia aumentaría la huella de carbono de la operación.
Evitar cuellos de botella y proteger a la fuerza laboral
Las actividades de manejo de materiales ocurren en todas las etapas de extracción de mineral, procesamiento, manejo de desechos y transporte al mercado. Muchas variables pueden interrumpir la cadena de suministro y provocar congestión o cuellos de botella, equipos no disponibles, rendimiento ineficiente de los procesos y problemas de productividad laboral. Si algún equipo no funciona según las especificaciones, puede afectar seriamente las operaciones, porque los costos asociados tienen un impacto directo en los presupuestos operacionales.
Si la planta de proceso no se puede alimentar de manera confiable, la eficiencia se verá afectada negativamente y la tasa de recuperación o producción no cumplirá con las expectativas. Si el sistema de manejo de relaves está fuera de servicio, la planta no podrá operar.
Comenzar por definir las propiedades de flujo de materiales
El paso más importante en el diseño confiable de un sistema de manejo de materiales es comprender las propiedades de su flujo. Los minerales son todos diferentes, y los metalurgistas siempre insisten en programas de pruebas robustos para definir la ley y diseñar el proceso para maximizar la recuperación. El mismo requisito existe para diseñar equipos confiables de manejo y procesamiento de materiales. Esto es especialmente cierto para el diseño de contenedores y tolvas (equipos de proceso por derecho propio) y los diseños confiables sólo se pueden lograr utilizando las propiedades de flujo de materiales establecidas por un programa completo de pruebas de laboratorio. Necesitamos una comprensión profunda de la fluidez del material en cada paso para que el equipo pueda diseñarse correctamente para el propósito previsto.
El programa de pruebas y los criterios de diseño también deben considerar variables como el contenido de humedad y la temperatura ambiente porque, en climas fríos, los materiales a menudo se almacenan y manipulan en condiciones climáticas extremas, incluidas lluvia intensa, nieve y condiciones de congelamiento. Muchos materiales exhiben características de flujo muy diferentes después de un tiempo en reposo y el equipo debe diseñarse para el peor de los casos. También es importante determinar si los materiales se auto-calientan o son explosivos. Si lo son, se deben diseñar características especiales en el equipo de manejo de materiales y en los procedimientos operacionales para minimizar cualquier riesgo de incendio.
Todas estas consideraciones deben tenerse en cuenta en los criterios de diseño, ya que forman la base de diseño para un sistema de manejo de materiales confiable.